Es en ese punto en que descubrí a mi nueva compañera del
blog. Hace años que hablamos y en una de esas maravillosas charlas que nunca
tienen punto final; me di cuenta de que tiene una manera de escribir y una
manera de pensar que realmente disfruto cuando la leo. Por eso le pedí que si
quería algún día escribir algo me lo mandase y así todos pudiéramos disfrutar. No hay mayor placer
que escribir algo que se piensa en susurros.
“¿Qué se
sentirá al besar a alguien pudiéndose apreciar desde fuera el amor que
comparten dichas personas?
No sé si lo
se, creo que no. Me gustaría experimentar alguna vez en la vida lo de vivir en
una nube; estar tan cegada por amor que todo parezca ir perfecto. Pero…tal vez
no seamos capaces de demostrar cuánto queremos a alguien y cuánto le
necesitamos. Por eso lo fastidiamos una y otra vez, como si dieran premios.
Somos
humanos y nos equivocamos, pero también somos personas y razonamos. Entonces,
¿por qué ser infiel? Espero no entenderlo jamás.”
Nos leemos en una semana. No dejéis de pensar... Comentad, opinad, compartid.